Buscar en macroinstantes

sábado, 9 de octubre de 2010

Dead On Road, continúa la masacre silenciosa

Clase: Reptilia
Orden: Squamata
Familia: Colubridae
Género: Malpolon
Especie: Malpolon monspessulanus (Hermann, 1809)


Culebra bastarda atropellada
Sierra de Cabra (Córdoba), octubre 2010.

Lo siento por el que haya llegado hasta aquí buscando imágenes idílicas de fauna y flora, la foto de hoy no es agradable de ver, pero refleja una realidad cotidiana en todas nuestras carreteras. En estos días de otoño se produce el segundo pico de atropellos de culebras en las carreteras españolas, menor que el de primavera, cuando los machos entran en celo y cegados por el ardor amoroso cruzan las carreteras sin mirar, pero también muy importante, y que supone una segunda mantanza anual de nuestros infravalorados ofidios.

Pensaba hacer un post hablando de los atropellos de animales en las carreteras, pero no podría hacerlo mejor de lo que ya lo hizo Jose Joaquín Santos en su blog Gerena Verde, en el magnífico artículo "Carreteras de sangre...", cuya lectura recomiendo a cualquiera con una mínima sensibilidad hacia la Naturaleza para tomar conciencia de la verdadera magnitud de este problema.

Este año he visto vivos cuatro adultos y un juvenil de culebra bastarda (muertos mejor no llevar la cuenta), aunque no pude fotografiar a ninguno, pues la culebra bastarda, por si no lo sabían, es el ofidio más rápido de la fauna ibérica, aunque evidentemente menos rápido que los coches.

Un gran número de los atropellos se producen en carreteras comarcales poco transitadas, a veces en el interior de Parques Naturales como es el caso de la de la foto, donde costaría muy poco ir atento a la carretera y con una velocidad moderada que permitiera evitar atropellar a estos y otros animales. A veces es imposible evitar el atropello, pero otras muchas es simple falta de sensibilidad con este problema. Soy consciente de que si de vez en cuando sigue muriendo algún lince atropellado, pedir respeto por sapos y culebras es un poco ingenuo, pero si cuatro de los conductores que lean esto, conducen a partir de ahora más atentos y conscientes del problema en zonas de riesgo, me doy por satisfecho.

Entradas relacionadas:
DOR

9 comentarios:

  1. Me alegro que te gustara el artículo, y te agradezco el enlace.

    Un saludo...

    ResponderEliminar
  2. Es a tí a quien hay que agradecer el trabajo de contabilizar las víctimas de esas carreteras y dar a conocer esa terrible sangría de animales. Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. Hay carreteras en las que es una auténtica tortura conducir si no quieres atropellar a ningún ser viviente, sobre todo en la noche. E increíble la velocidad a la que te adalentan algunos a los que no les importa lo que se lleven por delante. No lo entiendo muy bien, ya no sólo por el animal sino por tí mismo si se trata de animales como corzos o ciervos. En fin, hay gente "pa tó".

    En cuanto a las bastardas tuve la suerte de tener un encuentro fortuito con un ejemplar vivo bastante hermoso y doy fe de que es veloz, sí. Menudo susto me dio. Aparte de ser la culebra más agresiva que tenemos ¿no? aunque no por ello peligrosa. Pude comprobar las dos cosas en todo su esplendor. Creo que aún tengo la adrenalina a mil, qué carácter! ;) Y qué bonita el poquito tiempo que me dió a verla!!!!

    ResponderEliminar
  4. Bueno, yo no usaría la palabra "agresiva", que viene de agresión, pues una culebra jamás va a salir a atacar a una persona, siempre va a tratar de huir. Otra cosa es cómo reaccione cuando se ve acorralada o sorprendida o acosada y no tiene una huida clara. Es cierto que bastardas, herraduras y escaleras suelen desplegar teatrales actuaciones con bufidos, posturitas y bocaos al aire con la intención de ahuyentar al atacante, y si se las coge con la mano, muerden. Pero es defensa propia, no agresión. También las lagartijas muerden si se las coge con la mano y no por ello las consideramos "agresivas". No solo es la más veloz, también es la que mayor tamaño alcanza, hasta 2,40 metros, aunque yo nunca he visto ninguna tan grande.

    ResponderEliminar
  5. Bueno, a lo mejor he usado un término inadecuado. Me refería a que ninguna serpiente se me ha enfrentado así. Yo esperaba que reaccionase como todas las que me he encontrado, huyendo, porque sí que tenía posibilidad de huida. Pero no, debió ser el susto mutuo que nos dimos, que casi la piso, vaya. Al verla me fui hacia atrás, se irguió y me amagó. Y yo esperando poder verla en condiciones, ya que todas huyen tan rápido que no me da tiempo a disfrutar de ellas, casi no me moví esperando que la reacción siguiente fuera la de huida, pero no, se abalanzó literalmente sobre mí rápidamente con su cabeza a la altura de mi cadera y ya tuve que trotar rápidamente hacia atrás.
    Y ese amago tan feroz me asustó, la verdad, porque al principio pensé que no había por qué temer, pero ante el segundo amago ese color verde "hierba" que tenía me hizo fantasear con alguna otra especie...porque como ahora hay tantas especies provenientes de otros países que la gente suelta por ahí y yo no estoy muy puesta en el tema, ya sabes, la ignorancia (la mia)... ¡Qué veloz es, es alucinante! Es admirable. El caso es que no sé por qué quería esconderse, como finalmente hizo, entre la vegetación que yo ya había sobrepasado, por eso me echó hacia atrás. No sé si es que tendría nido o algo especial ahí.

    En fin, que como bien dices, agresión no, intimidación sí ;) Pero me alegro de haber disfrutado de una bastarda en todo su esplendor. Una experiencia más. Además era preciosa.

    ResponderEliminar
  6. Probablemente la sorprendiste y cuando te vio ya estabas "demasiado cerca" para su gusto y se sintió directamente amenazada. Que yo sepa la cobra real asiática (Ophiophagus) es la única serpiente en la que se ha documentado que hace un nido y protege los huevos. Me parece que las de aquí los ponen y no vuelven a pensar en ellos, pero puedo estar equivocado. Hubiera sido interesante que te hubieses plantao en el sitio o incluso avanzado en su dirección, a ver si realmente te mordía sin cogerla o solo era pose, aunque reconozco que en esa situación es muy difícil no dar un salto atrás instintivamente, de buena y convincente que es la actuación intimidatoria.

    Y el tema de las 'mascotas' escapadas, pues tienes razón. En realidad por poder te puedes encontrar de todo, que efectivamente, como bien dices hay gente 'pa tó', y los mismo el vecino del quinto es un flipao y tiene una cobra de estranjis en su casa. En pocos kilómetros a la redonda de donde vivo en los últimos años se han encontrado agámidos, una culebra Lampropeltis californiana, un varano y se avistó un pequeño cocodrilo o caimán tomando el sol en la orilla de un embalse. Quiero creer que todas estas especies no consiguen pasar el invierno aquí, o que morirán sin encontrar pareja, pero mira las tortugas de Florida, parecían tontas allí en su islita con palmera de plástico y ya ves...

    ResponderEliminar
  7. Pos sí. Pues no me quedaron ganas de quedarme ni siquiera a mirar, la verdad, ni a esperar a ver si me mordía. Ni mucho menos de cogerla. Sólo pensaba en largarme, jaja, como bien dice nuestro amigo bloguero Jesús Dorda me salió el instinto del miedo heredado de los primates ;)

    Un saludo!!!!

    ResponderEliminar
  8. hola!!! yo acabo de tener mi primer encuentro con una bastarda inmensaaaa!!!!!! estoy acostumbrado a las culebras de escalera e incluso a salvarlas de la carretera pues vivo al pie de una montaña y las escaleras crias salen por la noche al calor del asfalto....., bueno en fin hoy e alucinado!!!!!!!!!!!suerte q mi perra pincher me adbirtio de su presencia era tremendamente gorda y grande muy muy robusta....no se si se acababa de alimentar o estraba en estado de buena esperanza...lo q si se es que cuando a emprendido la huida era mas veloz que mi perra pincher nunca imagine que corrieran asi es algo subrrealista!!!!!!!!!!!ANIMAL PRECIOSO PERO AL MISMO TIEMPO IMPONENTE DE VERAS!!!!!

    ResponderEliminar
  9. Anónimo, sí, cuando están calientes son rapidísimas, se nota que vienen de Africa, allí hay muchas serpientes rápidas. Los ejemplares de más de dos metros son muy escasos hoy en día. La gente a ojo, influida por la emoción o el miedo, suele estimar medidas muy por encima de la realidad y ven muchas de más de dos metros, pero cuando las coges y las mides con cinta métrica 'encogen' bastante y rara es la que pasa de metro y medio. Pero existir, existen. Y al igual que se mueven a una velocidad sorprendente para un animal sin patas, si se ven acorraladas son adversarios duros de pelar. No todos los depredadores se atreverían a meterse con una bicha de estas. Por desgracia, estos ejemplares tan largos, cruzando las carreteras tienen todas las papeletas para acabar mal. Un saludo.

    ResponderEliminar